
El programa indica al operario qué producto debe seleccionar, dónde se encuentra, cuántos artículos coger o las referencias de cada uno. Gracias a su implantación, los pedidos se organizan de forma rápida y precisa, evitando errores.
La técnica picking gestiona la preparación de pedidos en un almacén con la selección de productos independientes para formar el pedido completo del cliente. Existen diferentes tipos, entre ellos se encuentra el picking por voz.
Con el picking por voz, el empleado desarrolla su labor con auriculares, micrófono y un dispositivo para consultar información.
El software SGA de la empresa envía indicaciones concretas sobre los artículos que el operario debe coger: producto, cantidad, ubicación… Una vez concluido cada paso, el trabajador manda la respuesta al sistema para continuar con el siguiente artículo o pedido.
La información que se intercambian entre programa y operario se vuelca en una base de datos para gestionar el almacén, tener un control de stock, saber qué artículos hay que reponer, etc.
El sistema pick-to-voice acompaña al trabajador durante todo el proceso de preparación del pedido.
Estos son los pasos que se deben seguir para una correcta preparación:
En pickcing por voz, los datos intercambiados entre el software y el empleado pasan a una base de datos para mejorar la productividad y gestión del almacén.
Conocer la ubicación exacta de los productos, qué cantidad es necesaria o a qué área debe llevarlos son algunas de las opciones más utilizadas del picking por voz para formar las órdenes de pedido del almacén.
El sistema tiene, además, una serie de validaciones para asegurar que el trabajador se encuentra en la posición correcta y que prepara el pedido siguiendo las indicaciones del terminal. Estas son algunas de las funcionalidades más destacadas del picking por voz: