
Descubre cómo puedes ofrecer una experiencia de usuario acorde a las nuevas necesidades de las grandes poblaciones, donde el cliente es más exigente con los tiempos y demanda inmediatez a la hora de resolver sus necesidades de consumo.
El comercio electrónico ha experimentado un crecimiento desorbitado en los últimos años. La digitalización de la población, la expansión de internet y de los teléfonos móviles inteligentes, unido a la facilidad para las empresas de crear sus propias tiendas digitales y páginas web ha provocado que las ventas online se multipliquen exponencialmente. Y a estos factores hay que unirle la reciente pandemia, el empujón definitivo al aumento de los pedidos online.
Pero en este crecimiento del eCommerce ha habido una clara evolución en las exigencias del consumidor y, por tanto, de las tendencias del modelo del comercio online, que se ha ido adaptando a los nuevos requisitos.
Si el eCommerce supuso una revolución para el comercio, con entregas a domicilio que tardaban en llegar entre 3 y 5 días hábiles, caracterizado por la creación de grandes centros logísticos y complejos servicios de transporte que ponían a disposición del usuario todo tipo de productos y servicios, los recientes cambios del consumidor online ha ido modificando este escenario.
Los plazos de entrega se han acortado a 1 día en muchas ocasiones, y las nuevas necesidades de consumo en las ciudades, donde el tiempo es uno de los bienes más preciados, ha supuesto una nueva evolución. Estamos ante la tercera generación del comercio: el Q-commerce.
Como hemos visto, el Q-Commerce (del inglés Quick Commerce, comercio rápido) es una evolución del comercio electrónico que ha reducido los tiempos de entrega enormemente.
El Q-Commerce se caracteriza por entregar pedidos de pequeñas cantidades en última milla, productos cotidianos que cubren necesidades inmediatas.
El Q-Commerce se enfoca en la velocidad de las entregas de pedido online. El plazo se reduce a menos de una hora desde que el cliente efectúa la compra, normalmente 30 minutos. Todo un reto para la última milla logística. ¿Por qué esta necesidad de inmediatez? Por el nuevo de modelo de consumo que impone el cliente.
El usuario de los pedidos online en las grandes poblaciones, con poco tiempo para realizar sus compras de productos básicos y que predominantemente vive solo o en pequeñas unidades familiares, demanda sobre todo inmediatez.
El contexto urbano tampoco facilita la movilidad, con grandes distancias que recorrer en transporte público o con la complejidad de coger un coche para una compra, lo que aumenta la demanda de servicios de reparto a domicilio.
Por eso al consumidor online urbano no le importan ya tanto los descuentos que pueda encontrar, sino que pone por encima de todo que el pedido le llegue rápido allí donde se encuentre.
La rapidez de las entregas se consigue con una buena red de centros logísticos de proximidad y aplicaciones que planifiquen las rutas más eficientes para cada destino.
La tecnología y los nuevos espacios logísticos son clave en el Q-Commerce. Vamos a ver qué herramientas facilitan el comercio ultrarápido y la logística de proximidad.
El Q-Commerce se ha expandido del sector de la alimentación y hostelería al retail, droguerías, tecnología y empresas delivery.
En muchos casos, encontramos empresas delivery que se asocian con establecimientos locales y supermercados para poder alcanzar la rapidez en sus entregas. Esta forma de colaboración empresarial es muy común en el Q-Commerce, ya que permite a los usuarios realizar pedidos de productos y tiendas locales al mismo tiempo que se benefician del comercio ultrarápido con entrega a domicilio.
Gorillas, por ejemplo, realiza entregas de alimentos y productos para el hogar mediante esta colaboración con proveedores locales (mediante dark stores y una red de comercios asociados).
La misma colaboración con establecimientos tienen las plataformas digitales Dija y Lola Market, que permite a los usuarios comprar en diferentes supermercados, o Uber Eats.
En España, ya contamos con potentes compañías que han surgido dentro del paraguas del Q-Commerce y los servicios de pedidos de alimentación y comida (food delivery) o la compra y entrega de todo tipo de productos retail. Glovo o Delivery Hero son un claro ejemplo de empresas Q-Commerce.
También encontramos empresas de comercio tradicional y digitales que han visto las ventajas de sumarse al Q-Commerce y ya ofrecen entregas rápidas a sus clientes online, como El Corte Inglés, Carrefour o Amazon.