
Prepárate para centrar los objetivos de la empresa en las necesidades reales del cliente, comprender mejor sus gustos, detectar tendencias y segmentar de manera eficaz acciones de venta y marketing.
Independientemente del tamaño de la empresa, para sacar el máximo partido a uno de los mejores CRM se debe tener un plan para su desarrollo. Pero, ¿qué es una estrategia CRM?
Su principal función es fidelizar a los clientes y aumentar las ventas. En el centro de cada estrategia CRM está el cliente y la calidad de servicio; es decir, es una visión de empresa cliente-céntrica. Además, engloba acciones de marketing digital centradas en la satisfacción del cliente, buscando una relación a largo plazo.
El factor clave del éxito comercial es colocar al cliente en el centro del negocio; y no solo referido a conocer cuáles son sus usuarios, sino a entenderlos y a tomar decisiones teniendo en cuenta que el objetivo final es aportarles valor añadido, a crear para él una planificación totalmente personalizada, conociendo y dando un servicio pensando en la satisfacción del comprador. Si es bueno para cliente, es bueno para la empresa.
Pequeñas y grandes organizaciones usan las estrategias CRM para conectar con el consumidor y conocerlo mejor.
La idea es identificar subgrupos de clientes que compartan características similares para personalizar las estrategias de marketing, ventas y servicio al cliente.
Al segmentar a los clientes, las empresas pueden crear mensajes y ofertas personalizadas para cada grupo, lo que aumenta la probabilidad de éxito comercial.
No todos los contactos tienen el mismo valor para una empresa. Segmentarlos permite identificar a los más importantes por volumen de compras, probabilidad de conversión o estado del funnel de ventas, enfocando los recursos a ese target.
La automatización de procesos en una estrategia CRM puede incluir desde el envío de correos electrónicos de seguimiento, la actualización de registros de contacto o la gestión del embudo de ventas, por ejemplo.
Este factor ayuda a los equipos de ventas y marketing a concentrarse en actividades de mayor valor con el cliente, y garantiza que todos reciben una atención personalizada y de calidad, adecuada a su ciclo de compra.
Puedes configurar tu software para que envíe automáticamente un correo de agradecimiento o seguimiento después de una compra, o crear flujos de trabajo automáticos que muevan a un cliente a través del embudo de ventas según su comportamiento.
El análisis de datos en una estrategia CRM implica examinar la información recopilada en el software sobre los clientes.
Gracias a los informes y reportes automatizados, entenderemos mejor las necesidades, comportamientos y preferencias de los clientes, lo que es vital para ofrecer productos y servicios que realmente les interesen.
También podemos identificar tendencias emergentes en el comportamiento de compras, permitiendo a la empresa adelantarse a las necesidades del mercado.
Establecer una correcta segmentación de clientes es uno de los pilares de una estrategia CRM eficaz, no recurriendo a los tradicionales criterios de geografía, demografía o perfil, variables que ayudan a entender quién nos compra, pero no por qué.
Con una visión cliente-céntrica se va un paso más allá en la comprensión de nuestros usuarios, teniendo en cuenta factores relacionados con sus interacciones con nuestra empresa.